miércoles, 1 de marzo de 2017

Otras noches

Se recordaba en noches pasadas que aparentemente fueron exactamente iguales a las presentes, donde las estrellas y la luna brillaban exactamente igual, y donde el viento resultaba exactamente igual de amenazante, pero, en las que el amor hacía de lo más oscuro lo más brillante, amor que era capaz de calmar ese viento y convertirlo en nanas para sus oídos, noches del pasado en que aún sentía presente la eternidad de todo...Sin embargo pronto comprendió que todo es volátil, hasta los sueños más hermosos...hasta las noches de luna llena congeladas en invierno, donde todo parece permanecer estático e impasible... Porque al final siempre acaba llegando un día nuevo, y la nieve se acaba convirtiendo en agua, porque al final siempre acaba llegando otro verano, con otros olores, otros colores y otra brisa...

Máscaras

No se como puedo pretender encontrarte,
si yo aún me sigo buscando.
No se como puedo pretender mostrarte mi verdad,
si yo aún me sigo engañando.
No se como puedo pretender impresionarte,
si ni siquiera yo misma se lo que puedo,lo que quiero mostrarte,
si todo mi ser es solo un relieve de luces y sombras en eterno contraste
que dibujan un laberinto...
Soy un camino tan claro y simple a veces,
pero otras soy un tenebroso desbarajuste infinito.
un borrón de barro en un papel mojado,
una madeja de lana de la que nadie se atreve a tirar del hilo.
Soy el esplendoroso estreno de un espectáculo de variedades sin fin y sin principio,
soy el ensayo de la obra de teatro más pobre y más insulsa,
una tribuna con una sonrisa de cartón pegado
y un par de piernas y manos que intentan hacer de decorado.
A veces tengo tan presente como la vida es solo un teatro...
A veces somos tan conscientes de que solo estamos actuando,
pero, otras sin embargo no sabemos distinguir
lo que realmente somos del papel que estamos realizando,
no somos capaces de distinguir nuestra verdadera esencia
de aquello que solo para placer de otros aparentamos,
evitando, mirando para otro lado,
tratando de ignorar nuestra propia noche,
nuestras propias bestias, nuestros propios monstruos
que a la vez son tan infinitamente humanos...
Nos metemos tanto en nuestro personaje
que no distinguimos de ese día de luces de neón prefabricado,
de ese maquillaje que intentando ser natural
resulta ser tan esperpénticamente exagerado...
Es esta vida una feria de vanidades,
un circo de los horrores disfrazados de milagros,
un museo de cera, personajes de gestos premeditados,
y milimetrícamente calculados,
en que todos aparentan estar vivos,
ser felices, con sus trajes de etiqueta,
como un día de fiesta que dura los 365 días del año,
Y es que querer ser una misma es complicado,
en ese momento en que una aún se haya buscándose
sin llegar a encontrarse del todo...
en un mundo en que ser genuino es casi un pecado.
Y es que en este mundo de locos
son muy pocos los capaces de ver al trasluz
lo que entre penumbras somos
aunque todos puedan ver lo que realmente aparentamos...
y es que en este mundo de locos
son muy pocos los valientes, los inconscientes,
los infinitamente cuerdos,
para mostrar lo que realmente son
y no lo que se estaba esperando de ellos...
Aquí y ahora me siento como una estatua casi sin vida,
en medio de un jardín botánico
que se convirtió en un desierto de plástico congelado,
viendo mecerse el viento a través de las horas,
mostrando esta perenne quietud,
ese alma caducándose a escondidas y a solas...
esta impasibilidad obligada,
esta imposibilidad de soltar las cadenas,
de dejarse fluir con las olas...